domingo, 1 de noviembre de 2009

Te quiero.

Miro el reloj, 'Joder, diez minutos tarde...' estudio la gente que pasa por la calle y ella sigue sin aparecer, resoplo y subo el volumen de mi ipod al máximo a ver si la música calma mi cabreo.
Suspiro 'Joder, qué tía, no llega pronto nuuuuuunca..' levanto la cabeza y allí está, sonriendome como si nada.

-¿Qué, aún no sabes que yo nunca llego tarde? - pregunto notablemente enfadada
-Venga nena, no te enfades... - coloca sus manos en mi cintura y me da un suave beso en los labios, olvidando que estamos en la calle.
- Ei ei ei... te he dicho mil veces que aqui no...
- Sí, pero no te apartas, además, es que te pones tan mona cuando te enfadas... -dice esto entrelazando su mano con la mía - ¿dónde vamos hoy?
- Y yo qué sé... donde siempre ¿o qué?

Tiro con suavidad de ella y empezamos a andar en silencio hasta que llegamos al bar de siempre
- ¡Eeeeeen fin! ¿qué quieres? - dice sonriendo

'Joder, es tremendamente guapa'

- Eerr... ¿café?
- Nonono, por favor... - se sienta rápidamente en la silla de al lado y baja la voz- que luego... no me gusta besarte...
- Pero... ¿eres tonta? - la miro bastante extrañada- pues una coca cola, va..

Se levanta y se acerca a la barra a pedir y me quedo mirandola desde donde estoy 'Joder, es el morbo en persona...'. Practicamente tiramos dos horas en el bar hablando de tonterías hasta que por fin marchamos y volvemos al sitio donde quedamos.

- Mmmm... estuve hablando con mi primo - la miro con cara de ¿y? y ella entiende lo que quiero decir- Naada, que te estuvo mirando las tetas en clase
- Tu primo es un gilipollas
- Pues te tiene ganas
- ¡Qué bien! me lo voy a tirar - Su cara en ese momento es un puto cuadro
- ¿Qué, qué pasa? oye, que era broma..

Yo debo de ser una escandalosa, o eso, o es que soy muy llamativa, porque según acabé de decir esto noto una mano en mi hombro.
Me doy la vuelta y ahí está 'Joder joder joder joder joderrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr CAAAAAAAAARLOS!' mi corazón va a dosmil por hora y me entran unas ganas tremendas de tirarme a su cuello.
- Coño, Berta, cuánto tiempo - coloca una mano en mi cintura y me da un beso en la mejilla
- Joder, no hace falta jurarlo ¿cómo has sabido que era yo?
- Esa voz no se me olvida facilmente... - Vale, soy una escandalosa
- Eh... vaya...
- Hostia, qué tonta, que no iba a mal... - en ese momento se inclina para besarme y voy recordandolo todo de golpe, cada beso, cada caricia, cada noche juntos.. y las ganas de tirarme a su cuello aumentan
- Ya, ya, imagino... oye, me tengo que ir, que estoy dejando a mi amiga un poco de lado... -le aparto ligeramente de mi, cosa que luego me enteraría de que le sienta muy mal.
- Bueno,pues ya quedaremos o algo, ¡Chao!

No consigo articular palabra y los ojos se me llenan de lágrimas, no de pena, sino de todo lo que tengo dentro contenido
- Te lo has tirado - Oigo detrás de mi. Es Carla, ya está enfadada.
- Sí, ¿algún problema? - Pregunto cruzada de brazos y mirandola fijamente
- No, venga, corre, corre a que te intercambie su saliba - baja del muro y empieza a caminar rápidamente
- Tía, eres gilipollas... - Grito desde donde estoy

Todo el mundo se nos queda mirando como si fueramos dos bichos raros. Al ver que se aleja demasiado voy detrás de ella

- Carla, Carla espera
- No, no, vete con tu amiguito, por como os mirabais parecía que ibais a follaros ahí mismo.
- Te dejo.
Al oir esto frena en seco y da media vuelta
- Vale, como quieras
- ¿Es lo que querías oír? Porque lo parece. - Se me queda mirando como una tonta y se acerca despacio, hasta rodearme el cuello con los brazos y besarme con fuerta
- Sabes queno, sabes perfectamente que lo que quiero oír es un...
- Te quiero.

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